domingo, 10 de agosto de 2014

El hombre equivocado - John Katzenbach

Durante tres días he vivido pegado a “El hombre equivocado”, estupenda novela de suspenso del norteamericano John Katzenbach.



Era una cosa que no podía soltar el bendito libro, y esto porque Katzenbach sabe perfectamente cómo mantener enganchado a su lector. Cada capítulo termina con una pequeña porción de droga que necesitarás consumir en el siguiente. Es un maestro este Katzenbach. En Youtube, busqué alguna entrevista sobre esta novela, pero hallé conversaciones con respecto a otras de sus muchos trabajos, y me di cuenta de que este escritor norteamericano tiene una legión de admiradores por el motivo que les acabo de exponer: sabe suministrarnos a nosotros sus lectores contadas y efectivas dosis de ese narcótico llamado suspenso.


(Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/John_Katzenbach#mediaviewer/Archivo:John_Katzenbach_2.jpg)

Como siempre, este nuevo hallazgo fue el producto de una de mis visitas a mi librería de viejo de Quilca: la librería del señor Luna, para más señas. Me costó 3 soles. Bueno, 2.5 por ser cliente conocido. Lo escogí porque las primeras líneas del libro (y luego las demás) son simplemente invitantes. Siempre que voy a la librería del señor Luna, con 10 o 15 soles, compro 8 o 10 libros.

A la fecha, he visto una buena parte de las entrevistas de Katzenbach en Youtube. Me quedo con esta frase que copio a continuación:

“La gente dice que escribo libros de suspenso psicológico. Todos los buenos libros debieran ser libros de suspenso psicológico. Todos los buenos libros debieran generarte esas ganas de voltear la página. Todo libro debiera ser excitante.”

Así es. No importa la técnica que se utilice para construir la novela, pero esa técnica y el resto de la artesanía que emplee el autor deben ser capaces de encender la curiosidad del lector de modo que éste simplemente se deje arrastrar, expectante, hasta la última hoja, sin tomarse siquiera un respiro para ver qué sucede allá afuera, en el mundo exterior.

A ver, hablemos un poco acerca de “El hombre equivocado”. No podrán olvidarse tan pronto de uno de los personajes principales de la novela, el psicópata Michael O’Connell. Este tipo es el malo de la película. Tuvo un cache fugaz con Ashley, la única hija del extinto matrimonio entre el profesor universitario de Historia Scott Freeman y Sally Freeman-Richards, quien ahora convive con Hope Frazer, una entrenadora de soccer en un colegio de mujeres. Así es Sally, una abogada más o menos exitosa, se arriesgó a apostar, a pesar de los prejuicios ajenos, por la relación que sentía más sincera, por convivir con Hope en la casa de ésta.

Michael desea a Ashley por encima de cualquier cosa e intentará de todo, hasta arruinar la vida de los seres queridos de la muchacha con tal de eliminar a cualquiera que se interponga en el camino de poseerla una vez más en cuerpo y alma.

Suspenso, violencia, intimidaciones y asesinatos. Todo ello se entrelaza cuidadosamente en “El hombre equivocado”. Pero, también, hay amor. Luego de que hayan experimentado la fascinante lectura de este libro, podrán acordar conmigo que el amor, en todas sus variantes, es el protagonista: El amor retorcido y obsesivo de Michael O’Connell por su víctima y el amor de los padres de Ashley que los llevarán a cometer una bárbara empresa, una empresa que no los volverá a dejar igual que antes.


Ahora, tendré que esperar que mi chica me regale alguno de los muchos otros libros de John: “La historia del loco”, “Un asunto pendiente”, “El psicoanalista”, entre otros. Porque las posibilidades de que llegue otro libro usado de Katzenbach a mi librería de viejo son remotas. Cuento contigo, por fa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario