Nacemos sucios
Y cuando pasamos a los brazos de mamá y papá
Se nos multiplica la
inmundicia
Y la
pestilencia es insoportable
Somos rencorosos
En bocas austeras
Y la indecisión del silencio prolongado
De nuestras
vidas tan breves
Termina
por aburrirnos
Por
cansarnos
¿Mamita
Ya es hora de mi leche?
No hay comentarios:
Publicar un comentario